Description
“Cuentan que, en un castillo, vivía un Rey que protegía excesivamente a su único heredero. Tanto es así, que no le permitía jugar con los demás niños de la aldea. El Príncipe pasaba la mayor parte de su tiempo encerrado en su suntuosa habitación…” La historia de “El Príncipe que no sabía jugar” tiene la virtud y la singularidad de que en lugar de la clásica doncella a la que hay que rescatar, divertir o despertar, aquí es un joven príncipe el que espera ser rescatado de su tristeza. Solo lo consigue cuando escapa y conoce la libertad. El tratamiento de la luz y la oscuridad, el sonido, la música, la duración y el tono de la narración de la historia, hace que el espectáculo sea recomendó para niños y niñas mayores de 3 años y especialmente, para toda la familia.